César Romero, Responsable de Marketing

Padre de dos criaturas y a sus 39 años de edad, César Romero Responsable de Marketing, es el más veterano de la empresa, después de los dos fundadores de Nadie Sin Su Ración Diaria.

Se subió al barco en julio de 2020, cuando apenas el proyecto había dado sus primeros pasos, hasta día de hoy. 

Ecuatoriano, licenciado en Diseño Gráfico y Publicidad, con un máster en Marketing e Investigación de Mercados en España y actualmente cursando un doctorado en Marketing.

Desde el minuto cero supo que esta empresa era su lugar y que iba a trabajar duro para que llegara lo más lejos posible. 

La función de César Romero como Responsable de Marketing es investigar el mercado, definir parámetros, trazar objetivos, buscar estrategias y acciones a realizar en función de los objetivos trazados, además de controlar mediante métricas los resultados que va obteniendo la empresa, tanto externa como internamente. 

Como podéis ver, un trabajo nada simple. 

¿Cómo es César?

César es amante del fútbol y del cine, le gusta dibujar y escuchar música, concretamente es fan de grupos como Coldplay o Imagine Dragons.

Lo que adora especialmente es pasar tiempo con su familia y si es viajando en coche para visitar lugares nuevos, más aún. 

Al llegar a España, pasó ocho meses lejos de su familia y ahora que están juntos se dedica a aprovechar al máximo cada momento con ellos por simple que sea. 

Aunque le encanta la comida de su país, en especial un plato tradicional de su ciudad natal, Guayaquil, llamado “encebollado”, se enamoró perdidamente del queso y jamón de España, además de la paella y mariscos de la costa mediterránea.

Es padre de familia, pero también dentro de la empresa asume un rol similar. Pone todo su empeño en que el proyecto de NSSRD sea reconocido e identificado mediante las donaciones digitales de alimentos y la labor social que las comprende. 

Desde su punto de vista, la iniciativa es una idea genial transformada poco a poco en una realidad maravillosa, gracias al sacrificio y convicción de todos los trabajadores, que asumen la sociedad y la solidaridad como pilares fundamentales para lograr sus objetivos.

César está dispuesto a continuar siendo un gran activo para la empresa, entre otros motivos, para que algún día pueda ser replicado en países como el suyo, donde lamentablemente hay muchas personas sumergidas en la pobreza.

“La comunidad que he encontrado en cada una de las personas de NSSRD es algo que contribuye a mi bienestar dentro de la empresa, además, la buena relación que se mantiene desde los fundadores hasta los becarios hace que todo fluya en el buen camino".